Posibilidad de aunar lo laboral y lo personal es, desde hace años, una de las principales demandas de los empleados
3 minutos de lecturaPosibilidad de aunar lo laboral y lo personal es, desde hace años, una de las principales demandas de los empleados. Ocurre lo mismo en la rama del turismo, si bien es cierto que hay muchos puestos que requieren de una presencialidad total. Tanto en estos casos en los que es posible el teletrabajo, las compañías deben ser conscientes de que conciliar permite trabajar mejor. Así, se convierte en otra vía mediante la cual conseguir una buena customer experience.
Para alcanzar esta conciliación, es necesario un equilibrio. De tal forma, ningún aspecto debe impedir el desarrollo adecuado del otro. Por tanto, lo importante es que al final trabajador, empresa y cliente estén contentos. El problema es que se calcula que aproximadamente dos tercios de las personas con una mala conciliación tiene baja la moral. Además, uno de cada tres tiene una peor productividad.
Mientras, a largo plazo, las personas que trabajan más de 55 horas a la semana tienen un mayor riesgo de sufrir enfermedades coronarias. También son más proclives a la depresión y a la ansiedad. Esto es muy grave para ellos, pero también cuesta dinero a la empresa y a la seguridad social. Por este motivo desde la plataforma de creación de currículums online CVApp.es quieren ofrecer algunos consejos para encontrar un punto intermedio en el que todos los afectados estén satisfechos.
Rutinas de conciliación para una empresa saludable
Con la llegada de la pandemia, el teletrabajo se ha flexibilizado. Sin embargo, esto no siempre implica una conciliación real. Por un lado, porque la vida en el hogar puede presentar distracciones como ruidos molestos o problemas de conexión. Por otro lado, porque hay empresas que no proporcionan un modelo flexible y sensato de trabajo. Frente a esto, lo mejor es tener en cuenta los siguientes consejos, que también sirven para el día a día en la oficina:
Aprender a decir ‘no’
Muchas veces la gente dice que sí porque es más fácil, porque temen perder el trabajo, por no perjudicar a los compañeros… Pero decir siempre sí no ayudará a la conciliación. Hay que saber poner límites, para que la productividad tampoco decaiga.
Frenar la multitarea
Ser capaz de hacer varias cosas a la vez puede parecer una ventaja, pero en la mayoría de los casos no resulta eficiente. El cerebro colapsa cuando trata de llevar a cabo más de una tarea a la vez. Al final, los trabajadores tardan más tiempo en terminar sus proyectos.
Horarios fijos y rutina
Planificar las tareas es muy beneficioso. Lo mismo con los descansos, que deben respetarse. El aire fresco, literal y metafóricamente hablando, son siempre positivos para la concentración. Por tanto, ponerlos en la agenda como una reunión más puede ser buena idea.
Limita los tiempos
Tal vez creamos que más horas en el puesto de trabajo implica más productividad, pero es más bien lo contrario. Al cansancio se suma la Ley de Parkinson. Es decir, que cuanto más tiempo tengamos para realizar una tarea, más la procrastinaremos. El cerebro es consciente en el caso de plazos más acotados, de modo que se centra en la tarea rápidamente.
Flexibilidad para aumentar la motivación
Según un informe de Chartered Institute of Personnel Development, el trabajo flexible aumenta la motivación de los empleados. El horario fijo de nueve a seis está pasado de moda. Por el contrario, dar a los trabajadores la posibilidad de elegir es invertir en su fidelización. También una forma de asegurarse de que el trabajo se hará.
No solo para cuando se tienen hijos
En muchos sitios todavía piensan que si no tienes familia tienes más tiempo para trabajar. Por tanto, deberás hacerte cargo de los peores horarios o de las horas extra cuando sea necesario. Sin embargo, todos los trabajadores tienen derecho a una vida personal plena, sea para cuidar de una familia o de ellos mismos.
Educa a los compañeros «aspiradora»
Salvo en casos excepcionales, no conviene contestar llamadas del trabajo ni a emails fuera del horario laboral. Siempre habrá jefes o compañeros trabajando más tiempo que tratarán de absorber al resto para justificar su excesiva dedicación. O, simplemente, para sentirse menos solos.